IGLESIA DEL CRUCIFIJO
Destaca su bella portada románica y su rica ornamentación. Su construcción primitiva dedicada a “Santa María de los huertos” se atribuye a la Orden el Temple, pasando posteriormente a manos de la Orden de San Juan de Jerusalén. Se compone de dos naves, una románica y otra gótica. Destaca en su interior la talla gótica de grandes dimensiones del Crucificado en forma de “Y”. Cuenta la leyenda que unos peregrinos alemanes a su regreso de Santiago, en agradecimiento al trato recibido en el hospital de peregrinos de la localidad, donaron la talla que portaban a dicha iglesia.